La
marcha que se viene
por:
GERARDO ENRIQUE GARIBAY CAMARENA
7/02/05
Andrés
Manuel López Obrador ha convocado a una marcha para el día en que sea votado su desafuero, la verdad, lo anterior no sorprende
ya que la carrera política del hoy jefe de gobierno del DF ha estado cimentada en base ala agitación social y las “movilizaciones”,
desde los tiempos en que salia de Tabasco para realizar plantones en la capital del pais que solo retiraba tras llegar a un
acuerdo con el entonces regente y hoy diputado federal del PRD Manuel Camacho Solís.
La autoridad de los tribunales no se basa en la popularidad
de sus decisiones, sus determinaciones no están sujetas a "consultas" como el segundo piso del periférico y si, efectivamente,
AMLO desoyó una orden judicial, debe ser procesado conforme a derecho, al actuar de esa forma los diputados no estarán formando
parte de un “complot”, simplemente aplicaran las consecuencias jurídicas
necesarias al incumplimiento del GDF.
Para
López Obrador su desafuero “dependerá de la gente” o dicho en otras palabras de si los grupos de choque que el
controla a través de los Bejarano, los Batres etc. pueden imponerse al ordenamiento juridico y a la Cámara de Diputados. La
ley podrá ser incompleta, inadecuada, incluso injusta, pero es la ley y por tanto, si queremos vivir en un estado de derecho
debe ser respetada.
El
“peje” ha señalado en repetidas ocasiones que él no cometió ninguna irregularidad y le asiste razón, por lo que
el desafuero es injusto, de acuerdo a la doctrina del Jefe de Gobierno cada quien decide lo que es justo o no, lo que constituye
una peligrosa utopía ya que el orden jurídico resulta precisamente, de que sea otro, un tercero quien decida acerca de la
razón o no de nuestras pretensiones en base a una cierta normatividad.
Reza
el dicho que “la cabra siempre tira pa’l monte”, con su actitud AMLO confirma lo anterior, recurre al método
que tantas veces le dio resultado y le permitió obtener las componendas políticas que hoy lo tienen como alcalde capitalino,
la extorsión y la amenaza, el ya clásico “petate del muerto” de la agitación social
y la violencia, Andrés Manuel aplica nuevamente la misma receta que tanta muerte y atraso ha ocasionado en toda América latina;
de nosotros dependerá que México no siga el camino de países como Venezuela, Bolivia o Ecuador.
La técnica de AMLO durante estos últimos años ha sido la de jugar al defensor de los pobres y al símbolo de
los oprimidos, a pretender ser la victima de un perverso complot orquestado por: Carlos Salinas, Fox, la Segob, el PRI, el
PAN y todo aquel (sea de izquierda o de derecha) que no apoye a pie juntillas las acciones del GDF. quizá sus técnicas le
funcionen, pero en el trayecto habrá debilitado o destruido las instituciones que tanto trabajo nos ha costado formar a los
mexicanos para convertirse en un vulgar Hugo Chávez o en una imitación de Mussolini
Quizá no le preocupe mucho, al
final del día es la misma persona que "trabajaba" de agitador profesional durante los ochentas y principios de los noventas
en su natal Tabasco, en todo caso, solo hace uso nuevamente de métodos que le
funcionaron en el pasado, ya esta acostumbrado a comprometer el estado de derecho.
El
desafuero se plantea ya como una de las pruebas que tendrá que superar nuestra sociedad, el primero de muchos retos que México
deberá vencer para demostrar que ha dejado de ser un país de caudillos, movilizaciones, caciques y similares, que ha dejado
atrás la infancia política para convertirse en una nación civilizada y regida
por el estado de derecho, esperemos que asi sea, por el bien de todos.